Número – 925
- Encarnó los ideales de libertad y soberanía a lo largo de su vida tanto en el campo de batalla como en la arena política: Beatriz Mojica.
El Pleno del Senado de la República aprobó, con 97 votos a favor, el dictamen para inscribir, en el Muro de Honor de la Cámara y con letras en bronce dorado, la leyenda “Vicente Guerrero, afromexicano, consumador de la Independencia”.
Vicente Ramón Guerrero Saldaña, nacido el 10 de agosto de 1782 en Tixtla, Guerrero, destacó como uno de los principales protagonistas del movimiento independentista mexicano, como el segundo presidente del país y el primero de origen afromexicano.
Su participación en el movimiento independentista comenzó en 1810, bajo el mando de José María Morelos, y su resistencia en los años más difíciles de la lucha lo convirtió en una figura clave para la causa insurgente.
Al fundamentar el proyecto, Beatriz Mojica Morga, presidenta de la Comisión de Cultura, destacó que Guerrero encarnó los ideales de libertad y soberanía a lo largo de su vida, tanto en el campo de batalla como en la arena política, además de que su liderazgo llevó a consumar la Independencia.
Sin embargo, la senadora subrayó que con frecuencia se olvida que una de sus causas de lucha fue la abolición de la esclavitud en México, una de las medidas más importantes que llevó a cabo durante su presidencia.
“Este acto no sólo liberó a los esclavizados, sino que también envió un mensaje poderoso al mundo sobre los valores que el naciente Estado Mexicano buscaba defender. México fue el primer país de las Américas que abolió la esclavitud”, añadió.
Por parte de la Comisión de Reglamentos y Prácticas Parlamentarias, la senadora María del Rocío Corona Nakamura subrayó que a pesar de ser el presidente que abolió la esclavitud en México, Guerrero fue discriminado por ser afromexicano “hasta llegar a la ofensa y la burla por su raza y color”.
Sin embargo, también fue figura central del liberalismo nacional, promotor de profundas reformas que lastimaron los intereses de quienes ostentaban la riqueza y se pretendían dueños de los derechos más fundamentales de los mexicanos.
“La abolición de la esclavitud proclamada en Guadalajara en 1810 por Hidalgo y consolidada en un decreto por Vicente Guerrero en 1829, ha sido uno de los más grandes actos de humanidad de la historia de México y la mayor referencia de justicia social”, agregó.
Por parte de Morena, la senadora Susana Harp Iturribarría consideró que la inscripción de esta frase en el Muro de Honor también ayudará a recordar y visibilizar a los pueblos y comunidades afromexicanos y así avanzar en una agenda en su favor; “primero empezamos por nombrarlos, porque lo que no se nombra no existe, pero tenemos que seguir trabajando”.
Manuel Añorve Baños, senador del PRI, consideró que inscribir esta frase en letras doradas no sólo es un acto de justicia sino también un deber con quien defendió y consumó con su espada la Independencia y libertad de la nación; “Guerrero sigue hablando a las y los mexicanos de hoy por su ejemplo con las cualidades que se deben tener en el servicio público, como la sensibilidad y la no soberbia del poder”.
En tanto, del PVEM, Karen Castrejón Trujillo dijo que el papel de Vicente Guerrero en la consumación de la Independencia de México consolidó el fin del dominio colonial e impulsó la integración de los sectores sociales. Su legado, agregó, “continúa inspirando a millones de mexicanos para luchar por la justicia, los derechos de las personas y la reivindicación de las comunidades originarias”.